¿Te has parado a pensar alguna vez en el etiquetado de los neumáticos que lleva tu coche? Es más que probable que  no,aunque contiene información importante para tu seguridad, el medio ambiente y tus derechos como consumidor. Por eso, esta guía pretende ayudarte a entenderla y facilitarte la tarea de elegir unos nuevos neumáticos la próxima vez que tengas que sustituirlos.

La etiqueta europea sobre neumáticos es obligatoria desde el 1 de noviembre de 2012 en todas las ruedas de furgonetas y turismos que se venden en territorio de los países miembro de la Unión Europea y, desde el 1 de mayo de 2021, con la remodelación de su diseño, también deben portarla vehículos industriales (autobuses y camiones).

En el fondo, dicha etiqueta no es más que un sistema estandarizado, similar a la etiqueta energética de los electrodomésticos, que incluye información completa y especificaciones claras sobre, básicamente, tres aspectos: los niveles de eficiencia de un neumático en el consumo energético -de combustible- del vehículo; la adherencia sobre suelo helado, mojado y nevado y, por último, el ruido exterior que produce. Es, en definitiva, una herramienta que contribuye a la mejora de la seguridad vial, el medio ambiente, y que genera transparencia al ofrecer de forma clara la información de los fabricantes de neumáticos a los automovilistas y los profesionales de los talleres mecánicos.

Además, desde su nuevo diseño en 2021, la etiqueta también incorpora un código QR que lleva a la Base de Datos Europea de Productos para Etiquetado Energético (EPREL, por sus siglas en inglés), para ofrecer información más detallada del proceso de fabricación de los neumáticos. Asimismo, la nueva etiqueta presenta el nombre comercial o marca de los proveedores, su número de identificación del producto, sus dimensiones (en longitud), y su índice de carga y velocidad.

La etiqueta del neumático ofrece información sobre los tres aspectos fundamentales del neumático ya señalados (ahorro de combustible, agarre a superficies heladas, mojadas y nevadas, y ruido), ayudando al consumidor a reconocer y ver la diferencia entre neumáticos de mejor y peor calidad y eficiencia energética en el momento en que tenga que decidir cuáles comprar.

Quedan exentos de la etiqueta estandarizada los neumáticos recauchutados, los neumáticos con clavos o los de competición, entre otros.

¿En qué criterios se basa la etiqueta del neumático?

Gracias al etiquetado de las cubiertas, cada vez más consumidores son conscientes de la equivalencia de los neumáticos y que no todos presentan el mismo perfil de rendimiento. Además, proporciona confianza al comprar neumáticos y aporta mayor conocimiento sobre su homologación, el rendimiento que presentan, su seguridad según las condiciones climatológicas, y ayuda a elegir las ruedas que aporten un mayor ahorro de combustible y un mejor rendimiento.

Los criterios que se destacan en el etiquetado de neumáticos europeo son los siguientes:

  1. La resistencia a la rodadura o al rodamiento, que afecta directamente al consumo de carburante y las emisiones de CO2.
  2. La adherencia en superficie helada, mojada y nevada o la distancia de frenado sobre suelo mojado, que influye claramente en la seguridad.
  3. Las ondas de ruido de la rodadura del neumático, que aumenta la contaminación acústica.

Neumáticos

AFANE ha participado activamente en la difusión de los valores del etiquetado europeo de los neumáticos.

¿Cómo uso la etiqueta del neumático?

La etiqueta es un excelente punto de partida. Sin embargo, hay que completar su información, sobre todo en lo que respecta a la duración, y considerar las particularidades de sus desplazamientos y de su vehículo.

¿Cómo puedo estar seguro de tomar la decisión correcta?

Además de los tres criterios que aparecen en la etiqueta, deberá considerar la duración (que puede ser doble de una marca a otra) y tener en cuenta el tipo de desplazamientos más frecuentes, el tipo de vehículo y el estilo de conducción. No dude en acudir a un profesional si necesita consejo.